.

Que hoy me quiero sentir como un niño en pleno juego. Quiero vivir una aventura y eternizar este momento de juventud, que brilla, que no sabe de de nada de nada más que de vivir. Eternizarlo, como cuando Thelma y Louis se abrazan y saltan el Gran Cañón. Vivir esto eterno con vos, compañero, y escaparnos hacia las rutas que nos esperan, como Stuart y Vince cuando amenazan a un gran oso con un arma y parten hacia quién sabe qué destino. Quiero una vida de película, de acá para allá, preocupándome realmente de las cosas que realmente valen la pena. Subir al techo, ponerme los aurículares, fumarme uno y que la vida brille. Y que seamos como cada uno mierda quiera ser. Y que el trabajo sea hermoso, como lo es, y que el estudio sea hermoso, como lo es, y que la familia sea hermosa, como lo es, y que mi compañero sea hermoso, como lo es, y que mis amigos sean hermosos, como lo son; y que cada día me llame la atención que los malabares se parezcan tanto a la vida, que se mezcla, que se cae, que se levanta, que se tira y se pasa. Y la aventura de emprender nuevos caminos y el miedo de cortar por lo sano con lo antiguo. No se puede volver a lo antiguo. El camino del espíritu que se aleja de la city, que se aleja de los amigos del bb, que se aleja de las preocupaciones, que la alcancía, que las zapatillas, que la vida diaria ya te saca astillas. Porque el que se deja estar es comido, porque el mundo te invita a no compartir tu alegría, tu tiempo libre, tu tiempo ocupado. Que el trabajo, el trabajo, el trabajo y la plata, y el trabajo de vuelta y el sueño que tengo porque me levanto temprano.

Let it be and let it GO!